Si eres un amante de la fotografía, habitualmente irás en compañía de tu cámara de fotos. Ya sea para un evento familiar, una celebración, una tarde de paseo, viajando… usamos nuestra cámara y en ninguno de los casos es agradable quedarnos sin batería.
Para evitar que esto ocurra de forma inesperada, debemos seguir una serie de pasos como cargarlas previamente o asegurarnos del estado de la misma. Pero si hay algo más importante, es realizarles un correcto mantenimiento. Si llevamos a cabo una serie de pautas sencillas podremos prolongar la vida útil de nuestras baterías. De este modo no solo ahorraremos dinero, también nos ahorraremos algún susto.
Temperatura
Las temperaturas muy elevadas o muy bajas afectan directamente al funcionamiento de baterías. Si nos encontramos en un entorno muy frío puede disminuir el rendimiento de forma drástica. Existen cámaras diseñadas para estas condiciones. Lo mismo ocurre con el calor, someter a la fuente de energía de nuestra cámara a muchos grados puede llevar a que esta explote.
Condiciones óptimas
Si estimamos que vamos a estar un largo período de tiempo sin usar la cámara, debemos sacar las baterías evitando así que se sulfaten. También es recomendable dejarlas con algo de carga y no vacías completamente. Igualmente debemos conservarlas en un espacio fresco sin humedad. De este modo evitamos que sufran algún golpe o haya corrosión. Si observamos manchas verdes o marrones en los conectores metálicos, debemos limpiarlo.
Cargador
La propia carga de la batería es un paso que puede favorecer a la salud de la misma. Aunque no siempre lo tengamos a mano, el uso del cargador original del fabricante es esencial. Estos están diseñados de forma específica para la batería para no generar ningún daño, además realiza una carga óptima.
Cargas
Como veíamos en el punto anterior, las cargas son muy importantes. Es por ello que debemos evitar dejarlas cargando toda la noche, se recomienda hacerlo durante el tiempo de carga recomendado por el fabricante. También debemos hacer todo lo posible por cargarla antes de que se agote por completo.
Además de un correcto mantenimiento de la batería, si no queremos arruinar nuestro momento fotográfico, podemos seguir una serie de tips para que esta dure más:
- Evitar tener encendida la pantalla LED si no es necesario.
- Reducir el número de encendidos y apagados de la cámara.
- Desactivar el enfoque automático continuo.
- Llevar batería de repuesto.
- Saber que si usamos el modo vídeo estamos consumiendo batería de forma más acelerada.
- No revisar las fotos que hemos hecho desde la pantalla de la cámara.
Si sigues estos pasos tendrás menos posibilidades de estropear tu sesión fotográfica y que la vida útil de la batería sea mayor. A pesar de ello, son un consumible, por lo que con el paso del tiempo irá disminuyendo su rendimiento y capacidad de carga.
Llegado este momento, no debemos olvidar que dentro de ellas encontramos una serie de compuestos que son perjudiciales para el Medio Ambiente por lo que debemos depositarlas puntos de recogida selectiva para su reciclaje.